Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia

A lo largo de la vida, prácticamente todas las personas recibiremos algún hemoderivado obtenido de la sangre.  Cada día, muchos pacientes son sometidos a intervenciones quirúrgicas programadas, otros han sufrido accidentes de tráfico o laborales o  padecen cáncer y deben someterse a tratamientos agresivos, etc. Todos ellos precisan de una transfusión. Esta es la principal razón por la que la sociedad necesita de personas  que estén dispuestas a donar su sangre, bien para llevar la esperanza a dichos pacientes, para mejorar su calidad de vida e incluso para salvársela.

Si queremos disponer de una transfusión segura, debemos partir de una DONACIÓN VOLUNTARIA, ALTRUISTA Y RESPONSABLE.

1. Libertad.- Usted decide donar, nadie le obliga.

2. Voluntariedad.- Será usted quien decida cuándo  y dónde donará.

3. Altruismo.- Sólo le reportará la satisfacción  de haber hecho una obra útil y, por supuesto, como cualquier tejido u órgano humano, la sangre nunca será tratada como una “mercancía”.

4. La donación retribuida (pagada) demostró en el pasado ser peligrosa porque inducía a los donantes a ocultar datos sobre  su salud que pudieran comprometer la del enfermo.

5. La donación dirigida: procedente del entorno social o familiar del paciente puede no ser tan segura como la donación altruista, por ello no se suele considerar como la más idónea. Ni los pacientes ni sus familiares deben ser coaccionados para que donen, sin embargo, deben entender que los hemoderivados que recibirá su familiar deben ser repuestos y, por tanto, deben colaborar con la donación de sangre para que el sistema sanitario disponga siempre de un flujo continuo de donaciones.

6. Anonimato: Usted no sabrá  quién va a beneficiarse de su donación y los pacientes no sabrán quién ha donado la sangre que reciben, pero sí es seguro que la recibirá un ser humano que la necesita.

7. Solidaridad: La donación es un gesto solidario. A través de ella se instaura una nueva forma de comunicación y solidaridad entre los seres humanos.

8. Responsabilidad: La donación de sangre es un acto responsable  respecto a otros seres humanos y a la sociedad en que vivimos, cuyo abastecimiento de hemoderivados demostrará la plena madurez de la misma.